Asociación Corazón y Vida en Andalucia

Ayúdanos

¿Cómo colaborar?

Ayúdanos

¿Cómo colaborar?

Blog

Técnica Ozaki: una alternativa para la reconstrucción valvular aórtica

en que consiste la tecnica ozaki

En el campo de las cardiopatías congénitas, los avances médicos son una constante. El ámbito sanitario se encuentra en una búsqueda incansable por desarrollar nuevas y más efectivas formas de combatir estas afecciones cardíacas. Un claro ejemplo de ello es la técnica Ozaki, una intervención de vanguardia que se ha convertido en la esperanza de muchas personas con problemas en la válvula aórtica.

Encargada de permitir el flujo sanguíneo del corazón hacia la aorta, puede sufrir diversas alteraciones que comprometen su función. Entre las opciones de tratamiento se encuentran las prótesis valvulares artificiales y la técnica de Ross, que consiste en intercambiar la válvula aórtica por la pulmonar. Sin embargo, estas alternativas presentan algunas limitaciones, como la necesidad de anticoagulación de por vida en el caso de las prótesis y el crecimiento limitado en el caso de la técnica de Ross en menores.

En este contexto, la técnica Ozaki surge como una alternativa innovadora que ofrece nuevas posibilidades para el tratamiento de la enfermedad valvular aórtica. Desarrollada por el Dr. Tadashi Ozaki en 2007, esta técnica se basa en la reconstrucción de la válvula aórtica utilizando el propio tejido del paciente, el pericardio autólogo.

Esta técnica ha ganado popularidad en los últimos años debido a sus prometedores resultados a largo plazo y su potencial para evitar las complicaciones asociadas con las válvulas protésicas.

que son las valvulas cardiacas

Dolencia de la válvula aórtica

Por lo general, los problemas en la válvula aórtica se diagnostica a pacientes que cuentan con un problema en la apertura y cierre de dicho sistema situado en el ventrículo izquierdo.

Según se apunta en la web de Cardiopatías Congénitas La Paz, esta válvula, compuesta por tres velos, «suele presentar problemas en un 2% de la población». En las personas que presentan esta afección, los velos no trabajan de la manera correcta, generando una apertura y cierre imperfecto de dicho canal. Se trata de un problema congénito conocido como fallo de la válvula aórtica o válvula aórtica tricúspide.

En la insuficiencia valvular aórtica, como los velos no se cierran bien, esto permite que la sangre retroceda desde la aorta hacia el ventrículo izquierdo durante la diástole. Esto obliga al ventrículo izquierdo a trabajar más de lo normal para bombear la sangre de regreso a la aorta, lo que puede provocar agrandamiento del ventrículo, fatiga y dificultad para respirar.

En la insuficiencia valvular tricúspide, los velos tampoco se cierran correctamente, lo que provoca que la sangre regrese desde el ventrículo derecho hacia la aurícula derecha durante la diástole. Esto provoca que la aurícula derecha se agrande y el ventrículo derecho tenga que trabajar más para bombear la sangre a los pulmones, lo que puede ocasionar hinchazón en las piernas, pies y abdomen, fatiga y dificultad para respirar.

¿En qué consiste la técnica Ozaki?

La técnica Ozaki se realiza mediante cirugía a corazón abierto. Consiste en la sustitución de la válvula aórtica dañada por cúspides confeccionadas a partir del pericarpio del propio paciente. El pericardio autólogo, una membrana que recubre el corazón, se procesa cuidadosamente para crear tres valvas neo-aórticas. Estas nuevas valvas se implantan en la válvula aórtica afectada, reemplazando las valvas dañadas y restaurando el flujo sanguíneo normal.

Esta técnica ofrece diversas ventajas sobre las opciones de tratamiento tradicionales:

  • Uso de tejido autólogo: al utilizar el propio tejido del paciente, se elimina la necesidad de anticoagulación de por vida, lo que reduce el riesgo de hemorragias y otros efectos secundarios.
  • Crecimiento con el paciente: en el caso de bebés y adolescentes, la técnica Ozaki permite que la válvula neo-aórtica crezca con el paciente, evitando la necesidad de reoperaciones.
  • Preservación de la función valvular: preserva la dinámica natural de la raíz aórtica, lo que puede contribuir a un mejor funcionamiento de la válvula a largo plazo.
  • Reducción del riesgo de reoperación: se ha demostrado que esta técnica reduce el riesgo de reoperación en comparación con otras de reemplazo valvular.

Perspectivas de futuro de la técnica Ozaki

Si bien es una técnica relativamente nueva, numerosos estudios ya avalan su eficacia y la posicionan como una opción segura para los pacientes.

Según se indica en la web de Cardiopatías Congénitas La Paz, «En el caso de los adultos, parece no haber dudas sobre el uso de la técnica Ozaki ante casos severos de fallos de la válvula aórtica, algo que se puede extender a los niños, tal y como demuestran en centros de referencia internacional como el Children’s Hospital de Boston, donde se llevan a cabo cada vez más intervenciones bajo este sistema«.

Por tanto, la técnica Ozaki se presenta como un avance significativo en el tratamiento de fallos valvulares aórticos, ofreciendo una alternativa efectiva tanto para adultos como para menores. Desde su aplicación, muchas personas se han beneficiado de este avance médico, que se presenta como una alternativa innovadora, especialmente en el tratamiento de niños y niñas con enfermedades cardíacas congénitas.

Imagen portada: Imagen de freepik

asociación corazón y vida andalucía

Sobre el Autor: Asociación Corazón y Vida

Corazón y Vida es una asociación sin ánimo de lucro que trabaja por mejorar las situación de las personas con cardiopatías congénitas.

Noticias relacionadas

¿Quieres contarnos tu historia?

En la sección #CorazonesExtraordinarios damos visibilidad a experiencias en primera persona.

Si quieres compartir tu historia con nosotros, ¡escríbenos a prensa@corazonyvida.org!

¡Estaremos encantados de conocerla!

Suscríbete a nuestro boletín